Saturday, April 16, 2011

Amelia Doval y Josan Caballero, de COMUNICASIBER, con dos aportes para el Comite Pro Koubek Center


Estimados seguidores, comunicadores y colegas; amigos todos:

En estos momentos, nos encontramos enfrascados, en una de esas causas, por la que les solicitamos a ustedes, que nos apoyen, en la recaudacion de firmas del Comite Pro Koubek Center, para salvar una de las joyas arquitectonicas, culturales y educativa del Sur de La Florida, cuya sede esta proxima a ser cerrada, por las autoridades de la Universidad de Miami, a partir del 1 de junio.

Por eso, hemos creado un Himno “Salvemos al Koubek Center”, en proyecto de ser musicalizado muy pronto, para mover las conciencias ciudadanas, en torno a nuestra causa plural, y solicitarles, que firmen, en el siguiente link:

http://www.gopetition.com/petition/44472.html

HIMNO SALVEMOS AL KOUBEK CENTER

La voluntad de un gran hombre
nos ha legado el placer,
de reinventar su mansión,
como un templo del saber.

Un bastión de la cultura,
un coloso, que ha de ser
la patria de los cubanos,
junto al sueño de Koubek.

Salvemos el Koubek Center,
un coloso a conocer,
orgullo de los hispanos:
¡Es la mansión del saber!
¡Salvemos cultura, historia,
tradiciones, que al volver
traen vida a un pueblo entero,
herencia de John Koubek!

¡Es la mansión de los padres
y el derecho de nacer
nueva isla prometida,
con las ganas de volver!

¡Cuantas almas se salvaron
con el sueño del saber,
y transformaron sus vidas,
en la mansión de Koubek!

Salvemos el Koubek Center,
un coloso a conmover
la estirpe de los hispanos:
¡Nuestra mansión del saber!
¡Salvemos cultura, historia,
tradiciones, que al volver
traen vida al pueblo nuestro,
herencia de John Koubek!

¡Es la joya y patrimonio
de los que aprenden con el
centro de luz, entre hispanos,
en nombre de John Koubek!

La voluntad, que un buen hombre
trajo a la mansión Koubek,
nadie puede silenciarla:
¡Ni las tramas, ni el poder!

Salvemos el Koubek Center,
un coloso a renacer
el culto de los hispanos:
¡Nuestra pasión de saber!
¡Salvemos cultura, historia,
tradiciones, que al volver
donan vida a un pueblo ajeno,
herencia de John Koubek!

¡Salvemos con él la gloria,
por los cubanos de a pie!
¡Honremos hoy la memoria
de Rosa y de John Koubek!

¡Nuestra cultura se salva,
con la magia de tener
el espíritu de un hombre,
como el noble John Koubek!

Salvemos el Koubek Center,
un coloso a defender
la razón de los hispanos:
¡Nuestra nación del saber!
¡Salvemos cultura, historia,
tradiciones, que al volver
suman vida a un pueblo nuevo,
herencia de John Koubek!

José Antonio Gutiérrez Caballero
(Josan Caballero)
Miami, 14 de abril del 2011.
4 30 pm a 6 20 pm.


KOUBEK CENTER Y MIAMI, MIL PREGUNTAS SIN RESPUESTAS

Los soñadores viven, con la esperanza del gran milagro, que está por acontecer. La humanidad los critica, los sanciona, arrincona. en la esquina perdedora, y ellos continúan. El rechazo ajeno es su fuente de energía. Así nos sentimos, los que apoyamos la batalla, contra el silencioso futuro del Koubek Memorial Center. Las autoridades competentes, los “dueños” actuales, y algunos tardíos, no se pronuncian, o su voz es tan baja, que casi compite con la mudez.

Observando la apatía, la desinformación, en medio de tanta información, el encogimiento de hombros, como señal de no esperar, porque no se aporta nada, me hace pensar, en un Miami, adormecido por el sudor de sus calles y el llanto de la impotencia. Es difícil definir el futuro, pero algunas preguntas nos pueden ayudar.

¿Quiénes son los que pierden, cuando se contrata un administrador, para controlar lo malos manejos de Jackson Hospital, y se le ofrece un salario de aproximadamente $81 000 al mes?

¿Quiénes dejarán, que pisen sus manos o golpeen sus cabezas, cuando manipuladores, abogados, fiscales y policías actúan, a su antojo, siendo dueños del destino, y sin derecho a réplica?

¿Quiénes vaciarán sus bolsillos, cuando los impuestos sean tan altos, como la mentira que los sustenta?

¿Quiénes, después de pagar tres centavos más de impuesto para el transporte, quedaron sin respuestas y un pago constante, que te sonríe, desde la casilla automática de las carreteras rápidas?

¿Quiénes son considerados criminales, por el IRS, cuando no saldas algún impuesto, por pequeño que este sea, o moroso y estafador, por tener un retraso de pago a las tarjetas de crédito, por una suma que no excede el salario del mes de un gran Señor, que, además, ha sido descontado de tu sacrificio, o, simplemente, llevas el miedo de perder la casa de tus sueños, entre crisis y subidas?

¿Quiénes se ahogan, con la soga de los bancos, que se arma y escribe, en una hilera sin fin, de minúsculas negritas?

¿Quiénes perderán la batalla, contra la muerte, en una vida miserable, sin seguros médicos, ni emergencias gratuitas, ni medicamentos baratos y buenos?

¿Quienes enfermarán de exceso de horas trabajadas, over time no pagado, abusos de los dueños y vacaciones inexistentes?

¿Quiénes pierden sus derechos, por el miedo de crear un sindicato prohibido, o soportando las mentiras millonarias de los aparentes representantes?

¿Quiénes llevarán a sus hijos a escuelas populosas, con maestros mal pagados, agotados, con pocos recursos y una mala educación?

¿Quiénes sueñan, con una mejoría, en esa millonaria y fantasmagórica donación de la lotería, mientras esperan, por la respuesta que desentrañe la madeja de por qué prohibir los casinos, en beneficio de la sociedad y por qué hay otros que llenan sus bolsillos, sin aportar nada?

¿Quiénes son los culpables de vivir, en la corrupción, y además pagar por ella?

Una respuesta, Fuenteovejuna, Señor, sí, no hay dudas, que es el mismo pueblo, que, inerte y sofocado se va a la cama cada día, ahogando su inconformidad, en la protesta callada, temiendo a los resultados y a una mano poderosa, que lo pueda aplastar.

Los periódicos, la televisión, tanto como la ciudad, comentan sobre el cierre del Koubek Memorial Center, y esas mismas almas silenciosas continúan, sin pensar que su voto, su ayuda, su respuesta amiga, podrían hacer la diferencia, en una comunidad, donde la corrupción y la miseria son familiares cercanos.
Este es uno de sus derechos, un espacio de cultura, que debe ser entregado, para el desarrollo de una comunidad marginada. Miami necesita tomar conciencia, y esto, ni se inventa, ni se compra, se aprende a diario, exigiendo derechos y criticando los errores.

Este es uno de sus derechos, que se gana creciendo y apoyando causas justas, como estas del Koubek Memorial Center.


Amelia M. Doval
Miami, 15 de abril del 2011.

No comments:

Post a Comment